(Diario Financiero) El último reporte de JPMorgan sobre nuestro país contiene un duro diagnóstico, de esos a los que no estamos acostumbrados.
Y a pesar de que en él se destaca el llamado el comienzo del «segundo tiempo» del gobierno, con la manifestación de una moderación de las reformas -bajo la consigna de «realismo sin renuncia»-, el banco de inversión señaló que sólo con hechos concretos, la confianza del mercado, los inversionistas y los privados se podría recuperar. Ya no bastan los anuncios.
La entidad señaló que «en medio de un escenario económico débil y aprobación política baja, la presidenta Bachelet se dirigió al país, reconociendo la desaceleración y moderando también el tono de las reformas», para luego agregar que en las últimas semanas «la política y el escenario económico ha seguido deteriorándose».
La institución informó que aunque considera que el cambio en el ritmo y flexibilización de algunas reformas, y la alineación de los políticos bajo objetivos comunes, eran una noticia positiva, no era suficiente.
«A pesar de que la moderación política es percibida como una señal positiva del mercado, todavía estamos esperando a ver qué acciones concretas tendrán a lugar. Y creemos que esto es lo que se necesita para mejorar la confianza. Después de varios meses de crecimiento decepcionante y una agresiva agenda macro, creemos que el sector privado sólo va a reaccionar a las acciones concretas, que aún están por verse», dice el documento.
Luego, menciona que si el discurso actual se traduce en una real moderación por parte del gobierno, sólo ahí se podría ver una mejora en las perspectivas para el mercado de valores chileno.
«En consecuencia, manteniendo nuestra recomendación de UW (subponderar) en el país, nos mantenemos expectantes a los nuevos anuncios, ya que podrían ser un driver para el mercado de renta variable, que ha alcanzado los niveles mínimos en seis años».
¿Brotes verdes? ni cerca
Si hay algo que al parecer nunca apareció -ni estuvo cerca de hacerlo- fueron los famosos «brotes verdes» de la economía de los que hablaba el ex ministro de Hacienda, Alberto Arenas.
El reporte, por ejemplo, hace mención al «lánguido» último dato de actividad económica, que fue de 0,8%, en circunstancias en que sus estimaciones apuntaban a 1,3%, y el consenso iba por 1,5%; una «actividad minera mediocre, tasas de desempleo elevadas», a lo que se suman niveles de confianza de los consumidores y empresarios históricamente bajos.
«Nuestros economistas reaccionaron recortando las expectativas de crecimiento en 40 bps, a 2,3% para este año, y 3,1% para 2016, mientras que el Ministerio de Hacienda ajustaron desde 3,6% a 2,5% el crecimiento para 2015», señala el reporte.
El mercado
Por otro lado, JPMorgan detalló que el mercado local ha visto caer sus múltiplos y tasas debido a los malos resultados, aunque esto hace que las valoraciones ya comienzan a verse atractivas.
«Chile actualmente cotiza en un consenso de 14,4x -proyectado a doce meses- en el ratio precio/utilidad, (…) siendo éste el mayor descuento en las valoraciones dentro de América Latina», señala, agregando que mientras el escenario actual macro y político justifican un descuento así respecto a lo que se veía históricamente -de 15x-, creemos que si el contexto de reformas más moderadas y el aumento de la confianza del sector privado se materializa, el nivel de valorización actual podría ofrecer un punto de entrada atractivo» para los inversionistas.
Por otro lado, informa que en los últimos 30 días el índice MSCI Chile ha caído 4,2% -en dólares-, teniendo un desempeño peor que el de la región, que cayó 2,0%.
Bachelet en línea con Valdés
JPMorgan también se refirió al rol que está jugando el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, en esta nueva etapa.
Destacó su franqueza al afirmar que la política fiscal expansiva «ya está terminando» y que el actual déficit fiscal de 3% no da espacio para presionar por mayores recursos. «Además, pidió que las medidas de austeridad sean sostenibles y vayan en el mejor interés del país, para evitar el mal uso de las reservas para disparar artificialmente la economía. También fue claro en comunicar que no hay recursos suficientes para respaldar las reformas propuestas -al menos como fueron planteadas inicialmente-«, consigna el documento, que también señala que cuando la presidenta Bachelet se dirigió al país, lo hizo en línea con el pensamientos de su nuevo ministro de Hacienda, reconociendo que el programa político actual carecerá de financiamiento, y que es hora de priorizar y limitar las propuestas de acuerdo a lo que es realista y alcanzable dadas las limitaciones de tiempo y recursos.