(El Mercurio) Retrasos o suspensiones de proyectos en el sector minero, problemas de financiamiento y trabas para obtener concesiones de terrenos fueron algunos de los factores que incidieron en una nueva disminución de las inversiones privadas estimadas para los próximos años.
Así lo reflejó el catastro de la Corporación de Bienes de Capital (CBC) al cuarto trimestre del año pasado, que registró inversiones privadas por US$ 65.402 millones para el quinquenio terminado en 2018. Ese monto representó una baja del 4,6% respecto del reporte de julio-septiembre de 2014.
A la vez, se convirtió en el cuarto trimestre consecutivo de descensos, ya que la última alza se observó en el último cuarto de 2013. Igualmente, los US$ 65.402 millones representan la cantidad más baja desde el primer trimestre de 2013, comparados en términos reales.
Según la CBC, la disminución en las inversiones privadas se produjo porque se excluyeron del informe 32 iniciativas que aportaban cerca de US$ 6.450 millones al quinquenio. Si bien ingresaron 58 proyectos por otros US$ 3.234 millones, estos no alcanzaron a compensar la baja en monto global.
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«En términos generales, factores como el cambio en las condiciones del mercado (debido a una menor demanda esperada), el fracaso en la obtención de la concesión del terreno y la falta de financiamiento incidieron en que las empresas mandantes difirieran sus inversiones», comentó la CBC.
La mayor merma sectorial se produjo en la minería, donde la inversión contemplada para el quinquenio cayó 21%, pasando desde US$ 17.638 millones a US$ 13.887 millones entre el tercer y cuarto trimestre.
La CBC señaló que la merma en minería se explica por la salida de la estimación de cuatro iniciativas. «Las principales causas de los retrasos o suspensiones de los proyectos mineros están relacionadas a la situación de mercado y/o temas referentes a la evaluación de impacto ambiental», indicó la entidad.
Una de las iniciativas excluidas de la proyección es Pampa Blanca -producción de yoduro, sales ricas en nitrato y yodo-, de unos US$ 665 millones ligada a SQM en la Región de Antofagasta. De acuerdo con la CBC, «según lo anunciado públicamente por la compañía, la iniciativa aún no se ejecuta, y por ahora está descartada, debido a las condiciones menos favorables que existen en el mercado».
Las inversiones previstas a 2018 en el ámbito energético solo cayeron 0,9%, hasta los US$ 21.836 millones. Esta baja -dijo la CBC- está ligada a la exclusión de una central de generación eléctrica de ciclo combinado (gas y vapor) en el Norte Grande, ya que -de acuerdo con el desarrollador- esta obra está destinada a cubrir las necesidades de energía de expansiones mineras, las cuales en gran parte se han postergado. También se eliminó del catastro un proyecto fotovoltaico que aún no resuelve problemas de financiamiento y registra trabas con las obtenciones de permisos.
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Por el contrario, los nuevos proyectos que se añadieron al reporte de la CBC están vinculados, principalmente, a los sector de energía (con US$ 2.076 millones), inmobiliario (US$ 510 millones) e industrial (US$ 336 millones).
Destacan en los planes energéticos Infraestructura Energética Mejillones (de E-CL) , inversiones de Geopark, y el Terminal GNL Penco-Lirquén (de Biobíogenera).