(La Tercera) Que existe una crisis de confianza entre el empresariado y el gobierno, no es secreto para nadie.
Diversas han sido las instancias en las que el gobierno ha intentado acercar posiciones con el sector privado. Una de ellas, la agenda público-privada para acelerar las inversiones, y la otra los acuerdos en materia de Reforma Tributaria.
Todos estos gestos los agradeció ayer el presidente de la Sociedad de Fomento Fabril, Hermann Von Mülhenbrock, pero indicó que “el sector privado requiere de nuevas señales que generen las confianzas necesarias para seguir creciendo”.
El líder de la Sofofa dijo que Hacienda “juega un rol clave para entregar las certezas necesarias que reviertan este proceso de desaceleración y así comenzar un ciclo virtuoso de más inversión y mejores empleos”.
Agregó que este clima pro inversión, en el que deben participar todos los actores del mercado, “trasciende la política fiscal y monetaria y necesariamente debe constituir la base de una relación público-privada, basada en la confianza y en la voluntad de trabajar en un objetivo común, como es el desarrollo económico y social de nuestro país”.
Consultado respecto de las señales concretas que el empresariado esperaría, Von Mülhenbrock manifestó que “hay embajadores un poco perdidos que andan hablando (sic). Creo que esas son las cosas que hay que eliminar y escuchar más a la Presidenta. En la cena de Asimet, la Mandataria repitió que son las empresas privadas las que van a llevar a este país al desarrollo. Esos mensajes son los que dan confianza”.